¿En qué consiste?
La evaluación psicológica es el método científico que se utiliza para identificar, reconocer o esclarecer si es necesario algún tipo de tratamiento para una persona. Suele ser el primer paso ante la duda de “¿Necesito algo más que fuerza de voluntad?”, es un análisis verbal, psicológico y cognitivo, algo similar a una evaluación física, para determinar un tratamiento médico específico.
Motivos para acudir a Terapia
No todas las personas requieren terapia psicológica, en ocasiones es solo una etapa que nos está costando más esfuerzo del que solemos utilizar a diario, como cambiar, dejar o ser corrido de un empleo, terminar una relación, la pérdida de una mascota, etc. Sin embargo, cuando notamos que estamos utilizando los recursos a nuestro alcance y parecieran no ser suficientes; quizá estamos atravesando una etapa que no nos es posible sobrellevar por nuestros propios medios y pensar que “el tiempo cura todo”, podría empeorar la situación, es por ello que una evaluación psicológica nos ayuda a identificar si es necesario algo más que nuestra voluntad y deseo de sentirnos bien.
Sin embargo, cuando notamos que estamos utilizando los recursos a nuestro alcance y parecieran no ser suficientes; quizá estamos atravesando una etapa que no nos es posible sobrellevar por nuestros propios medios y pensar que “el tiempo cura todo”, podría empeorar la situación, es por ello que una evaluación psicológica nos ayuda a identificar si es necesario algo más que nuestra voluntad y deseo de sentirnos bien.
Cuando es evidente que nuestros propios recursos no son suficientes para minimizar el malestar como la ansiedad, el estrés, la depresión, los rasgos compulsivos etc.; también se sugiere una evaluación psicológica, para determinar la evolución del padecimiento que se tiene al momento de la recopilación de datos favoreciendo el tratamiento a llevar.
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Beneficios de una Evaluación Psicológica
¿Qué puedo esperar de este tratamiento?
Los psicólogos son profesionistas, capacitados y especialistas para realizar el proceso de diagnóstico que permite recabar la información mediante entrevistas estructuradas, semiestructuradas, abiertas o cerradas, favoreciendo en la recopilación de datos, como primer paso. También se suele evaluar mediante herramientas estandarizadas como los test psicométricos como segundo paso y diagnosticar trastornos psicológicos (en casos necesarios), como tercer paso.
El cuarto paso, que sería la devolución de los datos recabados es decir los resultados de dicha evaluación ya sea de forma personal (re-entrevista) o por escrito (en caso de solicitarlo), para posteriormente ofrecer una intervención personalizada ya sea una atención psicoterapéutica, farmacológica una combinación de ambas, o bien alternativas propias para cada caso en particular.